¡Zafarrancho de combate!

Oaxaca, Oaxaca, Jueves 29 de Agosto, 2024 (Fuente: Comunicado).- Este 28 de agosto se cumplen 28 años de la presentación pública del autodenominado Ejército Popular Revolucionario, EPR, en Oaxaca y no, no hay nada que celebrar.
Año 2003, según el Informe Especial de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos sobre el Caso de la Región Loxicha, la noche del 28 de agosto de 1996 fueron atacadas las instalaciones de corporaciones policiacas y militares en la población de Santa Cruz, municipio de Santa María Huatulco.
Señala este informe especial de un expediente de más de 10 mil fojas, al que ninguna autoridad ha hecho el más mínimo caso, que fueron atacadas la Partida de Infantería de Marina, la Policía Judicial Federal, la Policía Judicial del estado, la Policía Preventiva del Estado, la Policía Municipal de Santa María Huatulco y FONATUR.
Señala que ahí quedaron 13 muertos: cuatro infantes de marina, tres policías preventivos, un policía municipal, un civil y cuatro personas no identificadas presuntos miembros del Ejército Popular Revolucionario.
Carne de cañón que al grito de, ¡zafarrancho de combate!, fueron repelidos por los defensores de las instalaciones policiacas y militares.
Allá muy lejos, en el municipio de San Agustín Loxicha se festejaba al santo patrón. Las autoridades municipales eran activos participantes de las celebraciones, obligados por las tradiciones y por el encargo popular de su investidura. Desde las más altas esferas del poder se les fabricaron expedientes penales que los arrojaron a la prisión política por más de dos décadas.
Como autores materiales e intelectuales se les señalaba en esos expedientes judiciales, con jueces de consigna se les procesó y sentenció por haber cometido, se dijo, los delitos con todas las agravantes de ley.
Era gobernador del Estado, Diódoro Carrasco Altamirano; presidente de la República, Ernesto Zedillo Ponce de León y secretario de la Defensa Nacional el General Enrique Cervantes Aguirre. Desde entonces se ha dejado sentir contra los indígenas zapotecos de la Región Loxicha toda la fuerza del estado.
Cientos de indígenas perseguidos, torturados y encarcelados. Cientos de ejecuciones extrajudiciales, desplazamiento forzado de la población, desaparición forzada y exilio son los delitos más relevantes de esa guerra contra los más pobres entre los pobres que sigue vigente.
Ese Poder Judicial que ahora se rasga las vestiduras se ensañó con los consignados, procesados y sentenciados. Que los indígenas zapotecos hablaban y entendían perfectamente el español decían para no nombrarles traductores.
La llegada de Gabino Cué a la gubernatura en Oaxaca en el año 2010 y de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de la República en el año 2018 no han mejorado para nada la situación general de los indígenas.
Es hombre de izquierda se decía de Gabino Cué por sus aduladores, es el mismo discurso que tratan de encajar con el actual gobernador del Estado, Salomón Jara Cruz.
Y lo son, son la izquierda de la derecha…
Mientras tanto, para los pueblos indígenas, para los pobres siguen abiertas las puertas del infierno…