Mujeres, organizadas para enfrentar a un Estado fallido

*Un gobierno reprobado en políticas públicas a favor de la mujer diariamente vapuleadas con desapariciones, violencia, feminicidios y acoso, tanto en el trabajo como en la calle

*Este lunes todos comprobamos cómo es un día sin ellas, demostraron que los hombres no pueden solos

Mario GIRÓN

Oaxaca, Oaxaca, Martes 10 de Marzo, 2020.- Terminó imponiéndose la convocatoria “Un día sin nosotras” en Oaxaca de Juárez. Por ejemplo, la participación de las mujeres dejó con los ojos bien abiertos, de par en par, a la casta divina de la misoginia: instituciones y hombres ignorantes y, en consecuencia, machistas, acostumbrados hacer de las suyas en perjuicio de lo que ellos siguen considerando como sexo débil.

Aunque el de este lunes no fue el resultado calculado, lo importante es que en la Verde Antequera quedó demostrado que las mujeres están organizadas para enfrentar, de ahora en adelante, a un Estado fallido y reprobado en materia de políticas públicas favorables a la mujer, diariamente vapuleadas con desapariciones, violencia, feminicidios y acoso, tanto en el trabajo como en la calle.

Este lunes, los capitalinos comprobamos cómo es un día sin ellas, clasificadas como la mayoría de una población capitalinas.

Con “Un día sin nosotras”, nos demostraron que no podemos solos, que hacen falta las principales aliadas de la eficiencia en todas partes: en el hogar, empleo, oficinas de gobierno, instituciones bancarias, sector privado, en el comercio, escuela, calles, biblioteca, transporte público, hospitales, en negocios prestadores de servicios, en todo lugar, en donde la presencia de ellas es el universo, ya sea organizando para permitir que sigamos avanzando en el concierto de la creación, en armonía con el tiempo.

Fracasaron los agoreros acostumbrados a negar la realidad. El de este lunes no fue fracaso, las mujeres se salieron con la suya en buena lid, como signo de justicia; nos advirtieron que a partir de hoy nada será igual, anunciaron las horas contadas para la tolerancia e impunidad.

A punto de rebasar la veintena de feminicidios en los primeros dos meses y fracción del año nuevo en la entidad, las mujeres obligaron un importante alto en el camino para recordarles a las instituciones que no sirven.

Que siguen fallando en la prevención, investigación, detención y, en consecuencia, en el ejemplar castigo a los depredadores confesos de mujeres, pensando que ellas solo están como conejillas para la práctica de delitos consumados sin que a los infractores se les aplique la ley.

Este lunes se convirtieron en vergüenza las calles de la ciudad. A punto de solitarias, sin la presencia de mujeres caminando; las principales avenidas capitalinas lucieron sin congestionamiento vehicular. Importante número de damas no circularon, guardaron el vehículo para mejor ocasión.

Pero todo ello demostraba que en al igual como sucede en el país, Oaxaca no es tema de seguridad para las mujeres. 

Aunque las escuelas de todos los niveles abrieron las puertas, padres preocupados, sin saber si las hijas volverán al hogar sanas y salvas, optaron por sumarse a la protesta de ayer y no dejaron a niñas y jovencitas participar en el inicio semanal de clases.

Los importantes centros de trabajo como son las ciudades Administrativas y Judicial, escuelas, instituciones bancarias, como Banamex; empresas privadas, comprometidas con el derecho a la seguridad de las mujeres, se cansaron de esperarlas, no llegaron.

Alzaron la voz en Oaxaca y lograron hacerse escucharse. Nos recordaron que existen, que son importantes, pero sin justicia y seguridad para ellas.

De paso, dejaron subrayado que a partir de ahora nunca más un día, un solo segundo, en donde la mujer sea vapuleada, victimizada o desaparecida sin que el delito se castigue. De paso, nunca más permitir instituciones solo lamentando su mala suerte con nulos resultados en la investigación de delitos cometidos contra ellas.

Siendo mayoría poblacional en el país y por ende en Oaxaca, las mujeres demostraron ayer que no están cruzadas de abrazos. Que al fin amaneció para ellas y, ahora, sea como sea, no volverán a permitir que responsables de delitos y las instituciones sigan burlándose y demostrando que para ellos nada valen, de lo contrario, la impartición de la justicia a los delitos sería el pan de cada día en la entidad.

La movilización del pasado domingo y la confirmación de ayer en los hechos con “Un día sin nosotras” lograron el objetivo: impedir que el oficialismo desviara la atención, por ejemplo, bajando el telón e intentando que la sociedad no tome con seriedad que las instituciones no sirven al estar fallando en un ambiente social en donde se está disparando diariamente el feminicidio y los resultados en materia de justicia sigue brillando por su ausencia.  

En los hechos, aparece una luz al final del túnel, en una historia en donde las mujeres son las víctimas, solamente observadas por instituciones sin poder hacer mucho por ellas, sobre todo en materia de feminicidios.

Se trata de la LXIV Legislatura del Estado en donde las voces de las y los representantes populares no han callado, y ahora se alistan para llamar a cuentas a funcionarios del Poder Ejecutivo con fallas acumuladas en la misión de velar por la investigación y aplicación de la justicia, sin descuidar a los órganos encargados de la prevención del delito.

Por ejemplo, el Legislativo designó a comisionados de seguimiento a la atención de víctimas por violencia contra la mujer; la aprobación de acciones para prevenir secuestros y violencia de género; el respeto absoluto a la lucha feminista. Así como la unificación de voces legislativas para frenar cualquier tipo de violencia contra las mujeres. Castigo hasta por 40 años de prisión a quien ataque con ácido a mujeres. Ley Olimpia. Tolerancia cero a la violencia de género en espacios del Congreso. No sanción administrativa a las mujeres que participaron en el paro nacional.

En tal sentido las legisladoras ya lo habían anunciado públicamente en la víspera del paro nacional de mujeres:

“Queremos dejar de vivir con miedo: más de 400 mujeres asesinadas en los últimos tres años en Oaxaca”: diputada Karina Espino.

“Queremos que el grito de justicia de la mujer oaxaqueña se escuche en todo el mundo. Se movilizan mujeres en Oaxaca”: diputadas, Delfina Guzmán y Eliza Zepeda.

“Y que ese giro sea tomado en cuenta”, Irais Andrés, maestra.

“Queremos caminar, conocer, reír, soñar”, diputada Leticia Collado.

“Y tener seguridad de que tu vida, la mía y la de todas, vale”, Juana Verónica, artesana

“Queremos que las que alcen la mano para un cargo público tengan la oportunidad de hacerlo de participar”, Catalina Galán, ama de casa.

“Queremos erradicar la violencia contra todas y terminar con el sello de impunidad”, Elvira Pérez, comerciante.

“Queremos paz y seguridad”, diputada María de Jesús Mendoza Sánchez.

“Queremos que la mujer ya no sea sinónimo de acoso o violencia”, Teresa Galán, campesina.

“De agresiones, muerte y dolor”, Ángela Ortiz, maestra rural.

“En un ambiente de lucha se conmemora el Día internacional de la mujer”, diputada Gloria Sánchez.

“Queremos decidir sobre nuestro cuerpo”, diputada Hilda Luis

“Queremos libertad”, María Elena, artesana. 

“Me quiero, te quiero, las queremos vivas”, diputada Magaly López.

Para cerrar con broche de oro, los casos, los más sonados de una larga cadena de feminicidios, el asesinato de la fotoperiodista, María del Sol Cruz Jarquín, en junio de 2018, así como el de María Elena Ríos Ortiz, la saxofonista de origen Mixteco, la victima de Juan Vera Carrizal, el 9 de septiembre de 2019, dos casos sin resolverse, le ofrecen toda la razón a las mujeres que se movilizaron domingo y lunes, contrala inseguridad, impunidad y ausencia de impartición de justicia.