Finiquita Oaxaca 14 de sus conflictos agrarios

*Se ha reducido y frenado el riesgo de disputas agrarias en al menos 7 conflictos de alta explosividad

Oaxaca, Oaxaca, Martes 06 de Agosto, 2019 (Fuente: Agencias).- El titular de la Secretaría de Seguridad  Pública de Oaxaca (SSPO), Raúl Ernesto Salcedo Rosales, dijo que se ha reducido y frenado el riesgo de disputas agrarias en al menos 7 conflictos de alta explosividad.

El mando dijo que, en base acciones de inteligencia y de reforzamiento de la presencia policial, se evitó que en al menos 14 pueblos donde hay disputas por límites de tierra se reportaran enfrentamientos.

Tal es el caso de Cuilápam y Cuatro Venado, San Miguel Quetzaltepec y San Juan Bosco Chuxnaba, y Ayutla y Tamazulápam, además de Santo Domingo Petapa y colindantes, entre los casos más relevantes.

El mando informó que, en el resguardo de estas zonas de conflicto participan elementos y mandos de la Guardia Nacional.

En tanto, el secretario General de Gobierno (SEGEGO), Héctor Anuar Mafud, dijo que en Oaxaca se aplica un modelo único de mediación, para lograr solución a conflictos por disputas de la tenencia de tierra que, por su éxito, se han convertido en referente nacional.

Este modelo que podría ser emulado por el gobierno federal, al momento ha logrado poner fin a 23 conflictos agrarios de alta explosividad, tal es el caso del problema de límites entre Cuilápam de Guerrero y San Pablo Cuatro Venado, San Antonino Castillo Velasco y Ocotlán, Santos Reyes Zochiquilazola y San Martín Peras, y Santa Lucía Monte Verde y Santa Catarina Yosonotu, que tenían más de medio siglo de disputas, entre otros más.

Anuar Mafud dijo que en Oaxaca prevalecen 339 conflictos agrarios, de los cuales 245 son de riesgo bajo, 57 de riesgo medio y 28 de alto riesgo, en el entendido que un conflicto de bajo riesgo se pueda convertir de alto riesgo y se puedan generar enfrentamientos.

Dijo que, en Oaxaca, de los 94 mil kilómetros cuadrados, el 73 % es comunal, lo que hace que el conflicto sea entre comunidades hermanas, “lo que evidencia que el lío agrario es más difícil, más grave, de mayor riesgo y es más complicado resolverlos”.

“Nosotros estamos resolviendo en un promedio, un asunto agrario por mes, para poner fin a siglos de violencia entre pueblos por la posesión de la tenencia de la tierra, lo cual es un récord que no tiene ninguna otra entidad en la zona sureste, máxime si establecemos la actuación de un tribunal agrario que tiende a tardar años en emitir una sentencia. Por eso, con el modelo que se practica en Oaxaca, la paz llega más pronto y se aleja la violencia, y se permite a la gente volver a utilizar sus tierras”, refirió.

Mencionó que el avance en el finiquito agrario, alcanzado en menos de 2 años del régimen de Alejandro Murat, no lo logró Gabino Cué en 6 años de administración.

Indicó que la actuación de las instituciones en la solución pacífica y negociada con el instrumento del diálogo inteligente, ha abonado a la paz y a la gobernabilidad en el estado, facilitando la concreción de otros acuerdos encaminados al desarrollo de Oaxaca.

Aclaró que los acuerdos de solución están por encima de las resoluciones jurisdiccionales, ya que no se imponen criterios ni se emite resoluciones.

En tanto, el gobernador Alejandro Murat indicó que los conflictos agrarios son parte de la realidad que viven las comunidades y pueblos indígenas de Oaxaca, que por muchos años no fueron atendidos. Sin embargo, en los últimos años se ha apostado a favor del diálogo pueblo a pueblo para recobrar las condiciones de paz en las diferentes regiones del estado.

Aplaudió la voluntad que han tenido en la solución de los conflictos las comunidades que han antepuesto sus intereses para terminar con disputas de hasta 70 años de antigüedad y que, a su paso, han dejado enfrentamientos, agresión, abandono del campo y muerte.

UN EJEMPLO DE JUSTICIA AGRARIA

Entre las anécdotas por disputas agrarias, el Secretario General de Gobierno, Héctor Anuar Mafud, reconoce la solución al lío agrario entre San Martín Peras y la comunidad de Zochiquilazola, que detonó con una emboscada, donde uno de los pueblos en disputa agrede a sus colindantes en un tramo carretero, dejando un saldo 5 víctimas y 3 heridas.

En represalia, el pueblo agredido comienza a retener gente en la carretera, entre ellos a 16 personas, una de origen norteamericano, lo que causó que la embajada de ese país lanzara una alerta y, en tanto, el pueblo afectado amagó al gobierno estatal con que, si no había solución se iba a actuar, lastimando a cada uno de los retenidos, por lo que se empezó a revisar el conflicto y se detectó que la tierra en disputa le pertenecía a San Miguel Peras y Zochiquilazola no tiene posesión legal, sin embargo, tras un intenso diálogo y mediación, en un plazo de dos meses se logró firmar un acuerdo de paz entre ambas comunidades, lográndose la libertad de los retenidos.