Diputada local renuncia al PRI tras 15 años

Oaxaca, Oaxaca, Viernes 14 de Abril, 2023 (Fuente: Agencias).- Mediante un comunicado subido en sus redes sociales, la diputada local en Oaxaca, Mariana Benítez Tiburcio, dio a conocer que renunció al Partido Revolucionario Institucional (PRI), partido donde militó durante más de 15 años.

En una carta, en la que menciona que actuó con dignidad, responsabilidad y honorabilidad, adelantó que continuará trabajando por la agenda de las mujeres de México.

“En la vida de cada persona hay ciclos y momentos. Hoy mi ciclo como militante del PRI se agotó, estoy convencida que las decisiones esculpen nuestro destino. Hoy, decidí apegarme a mi misión como mujer y activista de nuestros derechos”, dijo en el comunicado.

Asimismo, agradeció a los líderes y lideresas con las que trabajó a lo largo de su trayectoria por el partido.

Pide el PRI a Samuel Gurrión, Gabriela Pérez y Mariana Benítez, renunciar a sus diputaciones

Por su parte, el Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Oaxaca, informó que se ha recibido este viernes la renuncia formal de la diputada local Mariana Benítez Tiburcio a este instituto político.

Al respecto, el CDE del PRI expresa que respeta a la decisión tomada por la legisladora, pues militar en un partido político tiene que ver con lo ideales, convicciones y compromiso de cada persona y dejar de hacerlo es un derecho y una decisión personal.

Sin embargo, la salida de Mariana Benítez y, en su momento de Samuel Gurrión y Gabriela Pérez, no se entiende y mucho menos se comprende, toda vez que ellos tenían un compromiso ineludible con el partido, compromiso que aceptaron tácitamente al asumir la diputación plurinominal.

Por tanto y dados sus argumentos para dejar de lado su militancia y su obligación, en congruencia deberían dejar las diputaciones que detentan, aunque la ley no lo prevea, porque a la militancia no se le hace justo que ocupen el espacio del partido y trabajen para otro tipo de intereses que nada tiene que ver con nuestra organización política.

Si no quieren que el priismo les escupa en la cara su traición, deben dejar las curules que se obtuvieron por el voto hacia el PRI y no hacia ellos.

Hay cientos de mujeres con merecimientos mayores, con trabajo probado y con convicción a toda prueba que sin duda se sentirán ofendidas por esta decisión tomada por Mariana Benítez, porque queda claro que los que hoy se van cuando el partido más los necesita, no valoraron lo que se les dio, no aquilataron la oportunidad que el PRI les otorgó y no honraron su palabra, ni su compromiso para con el partido.

El priismo oaxaqueño lamenta su decisión, pero deja en claro que su renuncia no incide en la grandeza del partido y mucho menos merma el trabajo que se ha iniciado con miras al 2024, en donde vale la pena decirlo será indispensable que quienes lleguen a esos espacios sean mujeres y hombres de reconocida militancia de convicción a toda prueba y de compromisos ineludibles.

En el PRI todos somos importantes, pero nadie es indispensable. El PRI hace diputados, no los diputados hacen al PRI.

Pelos de burra

*Una más que abandona el barco del PRI

Filadelfo Figueroa

Mariana Benítez Tiburcio, quien es diputada local por la vía plurinominal, dio a conocer su salida del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Por conveniencia se suma a las filas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), pues no quiere perder los negocios que trae su hermano Alberto con el gobierno de Salomón Jara Cruz.

Alberto Benítez Tiburcio fue quien se despachó con la cuchara grande en el gobierno de Gabino Cué Monteagudo y también trató de lo mejor a la constructora del actual mandatario oaxaqueño.

Como se sabe, Alberto Benítez manejaba a su arbitrio, desde su posición privilegiada en la Secretaría de Finanzas, la información de las asignaciones de los municipios, no sólo de los Ramos 28 y 33, sino, asimismo, de los “ajustes cuatrimestrales” que otorga la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Es más, se dice que su esposa, Viridiana Manzano, era socia de un despacho de asesoría a municipios, es decir, estaba metido hasta el fondo en un vil conflicto de intereses.

Mariana ha sido señalada recientemente por autoridades del distrito de Zimatlán-Zaachila de “bajarles recursos”, a cambio de favorecer a las constructoras de la familia.

Alberto Benítez Tiburcio fue otro de los mecenas de la campaña de Salomón Jara Cruz.

Mariana llegó a mencionarse como aspirante al senado, al dejar el PRI busca ser la candidata a este cargo en el PVEM con el padrinazgo de MORENA.

Antes se fue Samuel Gurrión, luego la hija de Eviel Pérez Magaña, y ahora Mariana Benítez; ellos llegaron como parte de las cuotas al interior del PRI, Partido al cual abandonan y se lanzan a las aguas agitadas de la política llevando el salvavidas de la traición.

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