Pide Iglesia respeto y tolerancia con instituciones
*Que no salgan de nuestra boca palabras que dañen, sino que sirvan para una mejor edificación, que ayuden a crear una comunidad mejor, señala el obispo auxiliar
*Es una buena oportunidad para pensar cómo se actúa como madre o padre de familia, si se está cansado, y como miembro de la sociedad si se ha perdido la esperanza, dijo
Oaxaca, Oaxaca, Lunes 13 de Agosto, 2018 (Fuente: Agencias).- Tras recomendar a los oaxaqueños a respetar y ser tolerantes con las personas y las instituciones, incluso con la misma Iglesia católica, el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, Gonzalo Alonso Calzada Guerrero, convocó a mantener una actitud diferente, ser respetuosos, comprensivos y tolerantes.
Durante la misa dominical del mediodía en la Catedral Metropolitana de esta capital, expuso sobre los momentos difíciles que deben pasar padres y madres de familia con sus hijos cuando no les obedecen o caen en problemas como la adicción a las drogas.
De igual modo, hizo referencia a la lección en la Biblia del profeta Elías, quien caminó 40 días y 40 noches: “Queda un largo camino, no nos desanimemos, no bajemos los brazos, el camino de la vida tenemos que vivirlo con espíritu cristiano, esforzándonos por vivir nuestra fe”, resaltó.
De ahí que convocara a desterrar los insultos, enojos, falta de paciencia y murmuraciones, porque “en la manera de tratar a los demás es como vivimos la fe”, señaló.
Asimismo, Calzada Guerrero solicitó ser amables, respetuosos y tolerantes, “que no salgan de su boca palabra que dañe, sino la que sirva para la edificación, la que ayude a crear una comunidad mejor”, argumentó.
Dijo que necesitamos ser más prudentes. “Si el desaliento llega a nuestro corazón hay que recordar que Dios está viéndonos y nos atiende”, añadió.
“Hoy es una buena oportunidad para pensar cómo se actúa como madre o padre de familia, si se está cansado, y como miembro de la sociedad si se ha perdido la esperanza”, dijo.
Expresó que en el caminar de la vida llegan momentos en el que se cae en el desánimo, ya que muchos padres se desesperan cuando sus hijos no responden como ellos quisieran, es por eso que muchas veces bajan los brazos y ya no quieren luchar.
Por eso aseguró que, la fe no sólo debe vivirse en el templo, sino en la familia, en la relación diaria, con la pareja y los hijos, viviendo la fe todos los días.
