Desean denominación de origen de la clayuda
*“Mujeres Emprendedoras Guanas”, de San Antonio de la Cal, intentarán el sueño de exportar al mundo
Mario GIRÓN
Oaxaca, Oaxaca, Miércoles 28 de Agosto, 2019.- La señora Lucía Hernández Reyes es presidenta de la Asociación Civil “Mujeres Emprendedoras Guanas” de San Antonio de la Cal. Se trata de un círculo de 52 señoras ganándose la vida honestamente, transformando la masa de maíz en la típica tortilla conocida como clayuda.
“Hacerles justicia a nuestras compañeras garantizándoles un poco más de dinero por lo que hacen, casi siempre a costa de la salud, una titánica labor que empieza a las tres de la madrugada, con la molienda del nixtamal, es una de las metas principales”, agrega la entrevistada.
“La idea es monumental, convertirnos en microempresarias, exportando al mundo la clayuda. Convertir en realidad nuestro sueño es posible. Hemos avanzando para alcanzar la denominación de origen, en la secretaría de Economía, en donde en breve tiempo obtendremos el objetivo”, explica la señora Hernández Reyes.
Guanas, en zapoteco, cuyo significado: “hacer tortillas, pronto pasará a la historia como ejemplo de organización de mujeres para progresar”, comenta la entrevistada. Y, tras suspirar por todo lo bueno que se avecina, destaca:
“Con la denominación de origen estaremos dando un paso importante para convertirnos en micro empresarias, con capacidad no solo para atender la demanda diaria de la ciudad y poblaciones cercanas a la Verde Antequera. Se nos presenta la oportunidad de exportar lo que con amor y responsabilidad hacemos desde tiempo inmemorial, familias de abolengo generacional en materia de señoras brillantes haciendo la tortilla típica de maíz en la entidad”.
“Se trata de un acto de justicia para nuestras compañeras que heredaron de los ancestros la capacidad para elaborarlas, un trabajo, del cual, muchas mujeres, mamás solteras, viudas o divorciadas, obtienen el dinero que más o menos alcanza para el sostenimiento familiar con hijos en la escuela o en la universidad”.
Se trata de un oficio por el cual se paga caro, hasta con la vida:
“Tenemos el caso de compañeras que entregaron la vida haciendo clayuda, el humo de la leña terminó afectándoles los pulmones. Mujeres valientes, murieron en la raya, en la mayoría de los casos, sin dinero suficiente para el cobro del médico especialista, mucho menos para el medicamento”.
En entrevista, la señora Hernández Reyes adelanta:
“Antes de alcanzar la denominación de origen, tenemos que conquistar la compra de maíz poblano por mayoreo para abaratar costo. Por ejemplo, al bulto de 50 kilogramos por 350 pesos bajarle 100, un ahorro significativo para nuestras compañeras, las que muchas veces, regresan con tristeza a casa al no vender toda la producción del día por lo competido del mercado o falta de poder de compra en las amas de casa”, reconoce.
Agrega que otro paso a conquistar será el dialogar con representantes de la industria hotelera y restaurantera:
“Queremos que la tortilla de San Antonio de la Cal se consuma en esos lugares, en donde además de calidad, los empresarios estarían en la posibilidad de comprar a mejor precio y todos saldríamos ganando, las compañeras, propietarios de negocios del ramo y, por ende, los consumidores”.
