Maestra del CBTIS 123 le mutiló el gusto por el estudio

*Es un caso más, por desgracia, de discriminación hacia una persona de un grupo étnico

 

Mario GIRÓN

Oaxaca, Oaxaca, Lunes 13 de Agosto, 2018.- Cerró la puerta a la verdad. No quiso abrirla. El director del CBTIS 123 del municipio de Santa Lucía del Camino, Oaxaca, Javier Luis Morales, se negó a enterarse de una lamentable realidad: que la maestra de Logística, Gabriela Ibáñez, dañó sicológicamente a la alumna Lisset. La discriminación de la docente destruyó emocionalmente a una jovencita indígena con el deseo ferviente de superación. Marcó para siempre a una estudiante, originaria de Santa María Puxmetacán.

Lisset, ya no estudia. La carrera escolar de la jovencita quedó en el III Semestre de la carrerea técnica en Logística. Desertó de un plantel de educación media superior en donde experimentó una terrible pesadilla, fue víctima de una docente, la cual, siempre tuvo tiempo para ofenderla y ridiculizarla públicamente.

Al respecto, el señor Leopoldo, padre del Lisset, con índice de fuego apunta:

“La profesora Gabriela Ibáñez destruyó a mi hija, le mató el gusto por el estudio. La orilló a dejar la escuela. Mi niña fue discriminada por una docente, la cual, se supone, está para brindarse a la educación y dirigirse con respecto al alumnado. Algo o mucho está mal en la cabeza de la profesora”, subrayó.

Hoy, la ex estudiante vive su propio drama, sigue siendo rehén de una pesadilla de la cual quiere despertar y superarla. La familia, de origen campesino, no se ha quedado cruzada de brazos en la desgracia emoción embargando a Lisset.

El dinero no sobra en el seno de una familia en la humildad, con actividad campesina, sin embargo, haciendo un esfuerzo extraordinario, pagan el servicio de un psicólogo, con sede en el municipio de San Juan Bautista, Tuxtepec. La paciente viaja cinco horas para llegar a la cita semanal con el profesional, aplicándose para recuperarla del daño sicológico recibido.

Con un dejo de tristeza, preocupación y enojo, el señor Leopoldo recuerda el momento cuando su hija decidió no inscribirse al IV semestre:

“Notamos un cambio negativo en su personalidad. La mayor parte del tiempo transcurría encerrada en su habitación. El llanto y la tristeza la embargaban. Su carácter no era el mismo. Lisset había cambiado de personalidad. Estábamos perdiendo a una jovencita cariñosa, feliz, respetuosa”.

Admitió que la intervención de un profesional de la Psicología ayudó a establecer la verdad, el origen del problema, el motivo del cambio radical en la conducta de Lisset. La discriminación de la docente Gabriela Ibáñez, se descubrió.

Hoy, el señor Leopoldo no puede explicarse lo qué sucedió:

¿Por qué Lisset? ¿Por qué ella? ¿Qué error cometió para convertirse en víctima de la maestra Gabriela?

Sin éxito, el pasado viernes intentaron hablar con el director de CBTIS 123. Fracasaron. Javier Luis Morales se negó, no quiso recibirlos para recibir la queja.

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