Oaxaqueños repatriados llenan de adicción e inseguridad sus pueblos
*En la población de Teojomulco se detectó que tres migrantes al regresar a esa comunidad, tras ser deportados, iniciaron problemas de inseguridad, robos, secuestros y asesinatos
Oaxaca, Oaxaca, Lunes 06 de Marzo, 2017 (Fuente: Agencias).- Autoridades sanitarias de Oaxaca reportaron un aumento en el número de migrantes que regresan con problemas de adicción a sus comunidades de origen, lo cual se ha convertido en un problema de inseguridad y salud pública.
La situación ha generado que, incluso, en algunos pueblos indígenas se haya determinado por parte de las asambleas comunitarias como norma, expulsar de sus comunidades a los migrantes que regresen con problemas de adicciones a drogas como cocaína o heroína.
También se han detectado a menores, hijos de migrantes, con el mismo problema, principalmente aquellos que llegan a cursar la secundaria en escuelas estadounidenses.
El coordinador de salud pública fronteriza y binacional en los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Rafael Aragón Kuri, aceptó que hay solicitudes para empezar a aplicar programas de farmacodependencia en municipios de usos y costumbres como parte de una estrategia de salud pública por el alto número de casos detectados.
“En el pasado, temas como el abuso en el uso del canabbis, la cocaína o la heroína entre jóvenes, en pueblos indígenas donde el régimen de mando es bajo normas comunitarias, era prácticamente imposible, sin embargo, en los últimos años el problema se ha agudizado derivado del regreso de connacionales contaminados con el problema de la drogadicción”.
En este sentido, la directora del Instituto del Atención al Migrante, Aida Ruiz García, platicó de dos pueblos donde el problema de adicciones ente migrantes se ha convertido en un conflicto.
Tal es el caso de San Bartolomé Quialana y San Lucas Quiavini, del distrito de Tlacolula, Oaxaca, donde la autoridad municipal ha tenido que sancionar a los padres de los niños de migrantes nacidos en Estados Unidos que, al regresar a su pueblo de origen, porque ha empezado a fomentar el uso de drogas.
Otro poblado con grandes problemas por las adicciones de migrantes es Santo Domingo Teojomulco, del distrito de Sola de Vega, Oaxaca, donde se reportó el caso de tres migrantes que regresaron deportados de los Estados Unidos por consumo de drogas, mismos que al regresar a sus comunidades empezar a buscar operar una banda de narcomenudistas que empezó a generar problemas de inseguridad, como robos, secuestros y hasta asesinatos.
Como norma, el pueblo determinó aplicar cateos y la detención de las personas involucradas, mismas que como norma y escarmiento fueron desterradas del poblado y, en consecuencia, confiscados sus bienes y terrenos que fueron donados a la comunidad.
