No era una clínica COVID, sólo un hogar

*Vecinos un asentamiento social habían denunciado una presunta clínica clandestina en donde presuntamente atendían a enfermos por COVID, algo que no se comprobó
Oaxaca, Oaxaca, Miércoles 20 de Enero, 2021 (Fuente: Agencias y Mario Girón).- En Oaxaca, la Secretaría de Salud estatal y autoridades municipales del ayuntamiento de la capital, realizaron un operativo sorpresa para inspeccionar una presunta clínica clandestina que operaba de forma irregular en la atención pacientes contagiados con COVID 19 en un salón de fiestas.
La denuncia de ciudadanos en redes sociales, que exhibieron videos, como la salida de ataúdes del lugar, alertaron a los gobiernos, estatal y municipal, que, ante el riesgo de una propagación masiva del virus SARS-COV-2 en la jurisdicción, ordenaron activar un operativo para verificar el lugar.
Sin embargo, al ingresar al establecimiento, nada hallaron, ninguna evidencia, sólo fueron notificados que en el lugar se atendió a tres familiares del propietario de la casa, quien reportó que murieron de COVID y que fueron trasladados a una funeraria para que fueran cremados.
Según se estableció, el lugar denunciado como falsa clínica clandestina, que fue supervisado, tiene el permiso de salón de fiestas y está ubicada en la avenida Revolución de la colonia Ampliación Dolores, avenida que divide a Ampliación Dolores, Primera Etapa y la colonia 7 Regiones.
“Somos de la Secretaría de Salud y venimos a realizar una inspección de este lugar, en razón a una queja ciudadana, respecto a que hay riesgo a la salud pública”, dijo un verificador de la Secretaría de Salud estatal, al tocar la puerta del domicilio para realizar la verificación legal.
“Desde que conocimos estas denuncias públicas en redes sociales nos apersonamos de forma inmediata en este lugar, obviamente, es un lugar donde hay evidencias de que han estado trasladando cadáveres de diferentes funerarias; la preocupación de todos los vecinos, es que, este sitio pueda ser un foco de propagación del virus, sobre todo, por las evidencias que hay, y junto con la policía municipal, nos apersonamos y solicitamos que se pudiera suspender cualquier actividades que estuvieran realizándose, dando que este lugar está dado de alta por el ayuntamiento como un lugar para fiesta y reuniones particulares. Desde ayer (lunes) le notificamos de tales actividades a la Secretaría de Salud y hoy se determinó una acción, al haber una respuesta del Estado, porque se trata de un asunto de preocupación general. Ante esas denuncias y evidencias, en algunos casos que hicieron los vecinos, se presume se dan servicios médicos clandestinos, porque carecen de permisos”, se expuso.
“Vamos a realizar acciones de desinfección en la zona, para evitar la propagación entre los vecinos y colonos”, afirmó Ángel Omar, representante municipal de la colonia Dolores.

Sin embargo, según la denuncia de los colonos, la falsa clínica clandestina lleva operando desde hace unos meses, y en el sitio entran ambulancias y salen carrozas, camionetas, “tenemos fotos y videos, lo habíamos denunciado ante la Fiscalía General y nunca hicieron algo desde hace varios meses, nos dijeron que querían pruebas y ahí están, qué más quieren, que nos empecemos a morir”.
Incluso, agregaron, ya se han infectado, y prueba es que en esta colonia ha habido muchos muertos. No puedes negar que no es cierto”, reclamaron los vecinos a los dueños del lugar inspeccionado.
En tanto, en entrevista, los mismos inconformes indicaron que la propiedad es del doctor Héctor Caballero, que es un médico jubilado del IMSS, y que el lugar lo operan para realizar, desde fiestas, hasta reuniones políticas, y ahora como clínica clandestina para contagiados con SARS-COV-2.
Secretaría de Salud no encuentra evidencia de clínica clandestina
Más tarde, al salir del lugar y tras la revisión, el personal de la Secretaría de Salud estatal reportó que no encontró evidencias de que el sitio fuera una clínica clandestina.
“Revisamos todas las instalaciones, no existe evidencia alguna, no tienen infraestructura, no tienen camas, no tiene oxígeno. Nosotros venimos a ver lo que existe hoy, y no sé también que haya a lo que hacen referencia, no se ve, tomamos fotos y evidencias, el dueño manifiesta que sí tuvo tres fallecidos por COVID, que estuvieron aislados en lugar y nos reportó el archivo de la funeraria, nosotros ya llevamos los nombres de los fallecidos y será el área jurídica la que investigue y van a evaluar qué procede”, reportó el verificador de la dependencia, en medio de gritos y protestas de vecinos que los acusaron de corruptos.
Además, la Secretaría de Salud informó que en los últimos 10 meses se han clausurado al menos 5 establecimientos que operaban de forma irregular en diferentes municipios, ofreciendo servicios médicos y de cremación a víctimas por COVID 19.
Es un hogar, no un espacio de atención a
pacientes COVID, resolvió la autoridad de salud

“Se trata de una residencia de uso familiar, no, de una clínica de atención a pacientes COVID 19, como se especuló lunes y martes en redes sociales, a través de vecinos que fotografiaron entrada y salida de carrozas en el número 303 de la avenida Revolución, colonia Ampliación Dolores, avenida que divide a Ampliación Dolores, Primera Etapa y la colonia 7 Regiones.
Así lo determinó el equipo médico y demás profesionales integrantes de la Comisión Verificadora de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), revisando centímetro a centímetro cada uno de la amplia residencia, en la cual no encontraron pruebas para establecer que se trataba de un espacio destinado a la atención de pacientes con tan peligroso contagio que a millones le ha costado la vida en el mundo.
Al respecto, el propietario del inmueble, Dr. Manuel Mendoza Carballido, informó que la inquietud de los vecinos fue la entrada y salida de una carroza que en diferentes turnos cargó con el cuerpo de tres familiares con peligrosos factores de riesgo los cuales se encargaron de complicar las neumonías y los pacientes terminaron perdiendo la batalla por la existencia ante un terrible y poderoso COVID 19.
Explicó el facultativo:
“Gracias a Dios, el trabajo y la familia tengo una residencia lo suficientemente grande para ayudar a los míos, en momentos de angustia o emergencia; en la planta alta, en diferentes habitaciones, estuvieron en tratamiento, mi cuñado, una tía y una bisabuela; en un espacio que no tenían en sus propios domicilios”.
“La batalla de los médicos y los medicamentos lo intentaron, sin embargo, no pudo salvarse la existencia de tres pacientes en situación de gravedad, los cuales ya dejaron de sufrir, por lo que inmediatamente tomaron cartas en el asunto los profesionales de la funeraria Divina Providencia”, agregó el profesional de la medicina.
Ahora, un poco más relajado luego de experimentar una reacción vecinal que pudo llegar al linchamiento, precisamente, por no contar con información verídica y solo dedicarse a la especulación, lo cual pudieron terminar en algo más triste, que el fallecimiento de mis familiares, observó.
“Mientras no cometa faltas a leyes y reglamentos que norman la sana y respetuosa convivencia social, un servidor, como propietario de un bien inmueble, pudo hacer lo que considere bueno; nada de malo tiene que abriera las puertas de mi domicilio para mantener aislados a tres familiares”.
En Oaxaca como en el país y el mundo, tenemos hogares con uno o más pacientes en tratamiento quienes por diferentes motivos no pudieron ingresar a un hospital público o privado; no es malo. Hice lo correcto; sin embargo, en lugar de investigar, vecinos se equivocaron haciendo cosas malas que parecían buenas, por ejemplo, fotografiando entrada y salida de vehículos, a carrozas y lo peligroso, asegurando lo que no existía, por lo que se puso en riesgo la seguridad mía y de familiares.
En este sentido, Mendoza Carballido condenó es escandalo vecinal por algo inexistente, lo cual pudo tener desenlace fatal. A gritos y empujones, los denunciantes exigían que la autoridad sanitaria concluyera que se trataba de un espacio de atención al público COVID, no como lo que encontró y comprobó la autoridad sanitaria, aseguró.