El niño astronauta
Oaxaca, Oaxaca, Domingo 16 de Agosto, 2020 (Fuente: Agencias).- En las redes sociales se ha hecho viral la fotografía de un niño vestido de astronauta, pero muchos no saben la historia de esta imagen que ya se viralizó en las redes y que tiene su origen en Salina Cruz, región Istmo de Oaxaca.
El infante se llama Víctor Aldebarán, le tocaba aplicarle su vacuna de los 4 años de edad, la había estado postergando hace ya unas dos semanas por el motivo de la contingencia, un hospital no es un lugar seguro, pero también es necesario tener su esquema de vacunas completo.
Pero como todo niño, es inquieto, nadie está acostumbrado a traer cubrebocas ni a tomar medidas es algo nuevo.
“A mí hijo le gustan mucho los trajes y hace unos días en una clase que tuvimos (clases en casa por la nueva normalidad) aprendió el sistema solar, le gusta ver por el GPS satelital, entonces, se me ocurrió adaptarle un traje de astronauta y, al mismo tiempo, protegerlo”, narra la madre que, en la imagen, se ve acompañando al niño.
Agrega que, “entre las cosas de la casa vi un traje de su papá que le dan en el trabajo, lo adapté a su tamaño sin tener que cortarlo, para que se pudiera ocupar después, busqué entre los materiales de manualidades que tengo para los trabajos de la escuela y está sujeto con limpia pipas, una en la cintura otra en cada piernita”.
Emocionada, la madre sigue explicando: “Cuando lo vio, me dijo que le faltaba algo, unos propulsores para poder volar alto al espacio y poder llegar a su vacuna (ningún niño va contento a que lo inyecten, creo, que la mayoría hace esto) busqué el material reciclado y obtuvimos los propulsores”.
Al llegar al nosocomio, “fue una experiencia mágica para él, porque fue vestido de astronauta; cuando llegamos al hospital vio a los soldaditos de Toy Story, que son los que están en las entradas resguardando la seguridad (los marinos), todos lo saludaban y él muy contento les respondía; adentro vio a otros astronautas que llevaban sus cascos, pero él estaba contento porqué él era el único que llevaba propulsores y lo hacían volar más alto hasta ver los planetas. Como buen astronauta no se quitó su traje. ni parte de su equipo, porque él sabe que los astronautas no se lo pueden quitar mientras estén en el espacio. Investigue donde le aplicarían la vacuna y le hice una ranura al traje para que no fuera necesario mover nada. Fue una experiencia galáctica para mi hijo”.
La mamá añade: “Todo esto que estamos viviendo (la pandemia) es nuevo para todos, pero si podemos hacer un momento mágico, ¿por qué no hacerlo? La imaginación de los niños y su inocencia es hermosa. Espero que veamos más niños protegidos y que, al mismo tiempo, que sueñen despiertos”.
