Don Isidoro, presa de la rapiña de sus hijos

*Al anciano no le dan de comer y lo tienen encerrado desde hace varios meses

*Vecinos denunciaron que hay días en que no prueba alimento, pero Ernesto, uno de sus hijos, cobra la pensión mensual del anciano

*Urge la intervención del gobierno municipal, estatal y federal, así como de la Fiscalía, pues al anciano le quieren dar pastillas para dormir para que “no moleste”

Salina Cruz, Oaxaca, Miércoles 05 de Agosto, 2020 (Fuente: Alfredo Luis).- Don Isidoro, un anciano de la tercera edad se encuentra enfermo y hambriento, pues sus hijos no lo van a ver y pagan a una persona que lo medio alimente. El longevo se encuentra encerrado desde hace varios meses y desde el 2018 fue la última vez que acudió a su atención médica al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

El hombre de la tercera edad casi no come y se encuentra desnutrido, esto por el abandono de sus propios hijos que, como aves de rapiña, se disputan la pensión mensual y los apoyos que el gobierno federal otorga a los ancianos como Don Isidoro.

El anciano se encuentra prisionero en su propia casa, misma que, sin su autorización, ya fue despojado por sus propios hijos, que sólo se acuerdan de él cada mes que le llega su pensión y otros apoyos que el gobierno federal da a los ancianos propias de su edad como la ayuda social.

Vecinos confirmaron que Ernesto, uno de los hijos de Don Isidoro, nunca lo ve y es el que cobra cada mes la pensión del señor y otros apoyos. Ernesto se encuentra en Huatulco y pagaba una persona que lo alimentara.

Los colonos dijeron que el anciano estaba en el olvido, hasta que llegó una joven mujer a cuidarlo, quien lo encontró en deplorables condiciones, pero gracias al cuidado que tenía, Don Isidoro comenzó nuevamente a levantarse.

La misma empleada le lavaba la ropa, lo alimentaba, lo aseaba, pagaba un estilista para rasurarlo, al grado de que el longevo volvió a ponerse de pie, agarrando fuerza, pues se encontraba abandonado y desnutrido, sin embargo, la trabajadora fue despedida por Ernesto, debido a que se negó a ser cómplice del maltrato del que es objeto Don Isidoro.

Ernesto, hijo de Isidoro, pidió a la trabajadora que desalojara la casa donde cuidaba a su padre, debido a que uno de los hermanos de Ernesto llegó a ver al anciano, a su padre, y pidió que le cediera los derechos, no sólo de la casa, sino de la pensión.

Por lo que, al llegar al mes, Ernesto ya no pudo cobrar la pensión de su padre ni de otros pagos que hace el gobierno federal, lo que lo encolerizó y pidió a la mujer que contrató que llevara a su papá al banco para que le regresara las tarjetas que le bloquearon, originando la disputa entre hermanos de la pensión del anciano.

La empleada, al negarse a ser partícipe de la inhumana acción de los hijos del anciano, fue despedida sin pagarle su salario, pretextando Ernesto que ya le había pagado todo y que supuestamente la mujer había cobrado rentas de los cuartos de la casa de Isidoro, por lo que, desde ese momento, el anciano quedó a la mano de Dios.

Hay veces que come, otras veces no, señalaron los vecinos. La casa huele a orín donde el anciano se hace, debido a que ahora no hay nadie quien lo atienda, por lo que temen por su salud, debido a que hay días en que Isidoro no come y hay días en que sólo prueba una torta que se lleva a la boca.

Tras despedir a la empleada, Ernesto, uno de los hijos de Isidoro, contrató a un amigo para que lo alimentara, pero esa persona sólo llega un rato y a veces no le lleva de comer, lo que tiene preocupado a los vecinos, debido a que Isidoro no come en sus horarios acostumbrados.

De acuerdo con la investigación que hemos realizado en torno a estos hechos, de la cual hay videograbaciones y testimonios, pudimos constatar que el anciano se encuentra desesperado por salir de esa prisión y ha buscado la forma de huir.

En las videograbaciones se ha logrado observar, cómo, el anciano toma un pesado bloque de concreto para golpear ventanas y puertas, de esta forma busca salir y huir de la casa donde lo tienen prisionero, pues sus hijos sólo saben cobrar su pensión mensual y el apoyo del gobierno federal.

Desde hace dos años en que Isidoro no va con su médico de cabecera en el Instituto Mexicano del Seguro Social (MSS) de esta ciudad y puerto, al contrario, todo parece presumir que sus hijos quisieran que muriera.

Y es que, Ernesto ordenó a la empleada que despidió hace algunos días, que se le diera a su padre pastillas para dormir, acción que se negó rotundamente la trabajadora, pues al preguntar a la farmacia que le vendieran el medicamento, la responsable le dijo que ese tipo de pastillas son controladas y debe ser expedida por un médico.

Le comentaron que se trata de somníferos que, si lo llega a tomar una persona de la tercera edad que se encuentra desnutrida y mal alimentada, es probable que le provoque la muerte, lo que significa que Ernesto buscaba que su padre muriera y le echaran la culpa a la trabajadora.

De acuerdo con las investigaciones que se hicieron al respecto, basadas en testimonios y video grabaciones, en estos momentos Isidoro sufre los embates de la ingratitud de sus hijos que, de acuerdo con los vecinos, se pelean por su pensión entre ellos mismos, pero nadie se preocupa por alimentarlo.

Durante los próximos días daremos a conocer una seria de videos para que, si alguna autoridad lo logra ver, acuda al Barrio Santa Rosa, lugar donde se encuentra preso Isidoro Sánchez Morales, ya que el DIF municipal de esta ciudad, al acudir en reiteradas ocasiones ante la denuncia de los vecinos, se dijeron incapaces de poder ayudarlo, pues señalaron que los mismos hijos o la familia del anciano deben intervenir.

Por eso mismo, es importante la intervención de personal de los Derechos Humanos, de la Fiscalía por el intento d homicidio de parte de la propia familia y del propio gobierno federal, para que inicien una exhaustiva investigación y logren apoyar a don Isidoro que, en estos momentos, lo más seguro es que no haya probado sus alimentos.

Vecinos que deseen aportar su granito de arena para alimentar a don Isidoro, lo pueden localizar en avenida La Paz del Barrio Santa Rosa, en una casa de dos plantas, lugar donde se encuentra el anciano, esto de acuerdo con videos, testimonios y filmaciones que están en nuestro poder.

Si alguna autoridad logra ver esta nota y la gráfica, con gusto podemos entregar videos del mal estado en que se encuentra Isidoro, así como otras filmaciones en donde el anciano busca escapar de la casa, tratando de demoler con pesados bloques una ventana para poder huir de ese abandono en que se encuentra o simplemente contactar al número 9711206400. Seguiremos informando.

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