Historia de esperanza en tiempos COVID

Claudia GONZÁLEZ

Oaxaca, Oaxaca, Miércoles 03 de Junio, 2020.- En tiempos del Coronavirus, COVID 19, se tejen diversas historias, muchas de ellas llenas de tristeza y melancolía, por la pérdida de vidas humanas, por el infierno que vive una persona y sus familias al infectarse con este virus y adherirse a un hospital.

Personas de diversos sectores económicos y sociales han visto llegar al COVID, ningún sector se ha salvado, el dinero y el poder económico, en este caso, de poco ha servido.

Y así, las historias se van desarrollando y evolucionando, muchas de ellas, también, de gesto amable, noble y de mucha solidaridad.

Una de esas tantas historias se teje en la colonia Reforma Agraria, ubicada en cercanías de la capital de Oaxaca, protagonizada por Doña Rosa y su pequeño hijo Aarón.

Y es que, transitando por la avenida Periférico, a la altura de donde se ubica la empresa camionera Sertexa, frente al Oxxo, por la gasolinera, existe una cruda imagen.

Un pequeño, de nombre Aarón, ofrecía su plantita a un vehículo, pero nadie le compraba.

Quien narra dicha historia y la compartió en las redes sociales, señala que, “lo observé por unos minutos y me tomé el atrevimiento de acercarme a ellos y hacerles unas preguntas: Doña Rosa me contó que ella cultiva sus plantitas (ruda, yerbabuena, orégano, cilantro y otras especias) y las vende en su colonia por el rumbo de Arrazola”.

Uno de sus hijos trabajaba en los locales del centro que cerraron por la situación actual y que era el que la apoyaba con los gastos en la casa, pero ahora, ante la falta de trabajo, se ve en la necesidad de salir con su hijo más pequeño a vender (no tiene con quién dejarlo, porque la familia trabaja en lo que puede con tal de ganarse unos pesos y llevar a casa).

“Me contó que diario trae las plantas que pueda y que una señora enfrente le guarda sus plantitas que le sobran para vender al otro día (es la doñita de la fondita que venden tacos dorados y quesadillas)”.

Además, “me comenta que hace poco le robaron su celular, por eso no tiene dónde se comuniquen con ella (por quienes pidieron su teléfono)”.

“Lo que les quiero pedir es que, si van pasando, cómprenle una plantita, sus hermosos rosales están desde 20 pesitos. Estará yendo estos días a vender, porque dice que aquí puede vender un poco más que dónde vive, y si de corazón les nace llevarles una ayudita, bienvenida será”, agrega la narración.

“Yo sábado le llevaré mi aportación y pasaré por mi rosal y mi hierbabuena. Por favor amigos, ayúdenme a compartir y etiqueten a sus amigos. Hagamos una cadena de amor y ayuda por ellos. Les dejo la ubicación y fotos que me permitieron tomar. Y si alguien de tus vecinos necesita ayuda, igual difúndelo, siempre hay buenas personas dispuestas ayudar. Dios les bendiga a todos”, concluye esta historia que ya se ha vuelto viral en las redes sociales.