No cesa el acoso sexual en el transporte público

*Jovencita del CECYTEO narra la forma grotesca y ruin en que un taxista la acosó

*La estudiante interpuso su denuncia y da detalles del acosador sexual

Oaxaca, Oaxaca, Viernes 13 de Marzo, 2020 (Fuente: Agencias).- Una estudiante del CECYTEO (Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos de Oaxaca) del municipio de Santa María Atzompa, ubicado a 30 minutos del Centro Histórico de la capital de Oaxaca, denuncia  que fue víctima de acoso sexual del conductor del  taxi con el número económico 16 del sitio San José Atzompa.

La víctima pide justicia, ya que esto ocurre ante la inseguridad que se vive en Santa María Atzompa, donde el director de la policía y vialidad no hace nada, “al parecer, poco le importa patrullar más seguido en las horas pico”.

Esperemos que las autoridades competentes hagan algo para frenar este tipo de situaciones.

La joven estudiante narra los hechos que vivió, por fortuna el chofer maniático no consiguió lo que pretendía, es urgente que la Guardia Nacional y la Policía Estatal y los Agentes Estatales de Investigación (AEI) realice el patrullaje para mayor seguridad, ya que la municipal de Atzompa no hacen nada.

Así narró lo que vivió la víctima, ante la impotencia, no tener apoyo de la policía:

“Yo no soy de las personas que publican este tipo de cosas, pero esto ya es mucho.

¿Dónde está nuestra seguridad como mujeres?

El día de hoy me acosaron y me tocaron.

Así es, fui víctima de una persona asquerosa.

Como normalmente hago mis cosas, hoy me paré para irme a la escuela, me arreglé y salí rápido hacía la escuela, pues se me hacía algo tarde.

Así que me apresuré a caminar hacía la parada de los taxis de Atzompa de aquí de Plaza Bella, al llegar me crucé la calle y esperé, pasaron 10 minutos siendo las 6:50 de la mañana, tomé el primer taxi que llegó dirigiéndome a mi escuela (el CECYTEO), normalmente pregunto, aunque diga Atzompa si suben al CECYTEO.

Así que, primero dije buenos días y pregunté si sube al CECYTEO; para esto, el señor me responde que sí, pero al ver que dos hombres venían atrás, preferí por mi seguridad irme adelante.

Todo marchaba bien hasta que a 3 cuadras adelante se sube una mucha adelante conmigo. En este cambio me tengo que arrimar hacía al conductor, trato de no quedar tan pegados; ya que la muchacha cierra la puerta, el señor arranca.

Al momento de él mover la palanca siento su mano en mi pierna, lo primero que pensé fue quizá fue un accidente, no quise alarmarme tan rápido, pero esto volvió a suceder nuevamente, cuando surgió la segunda vez decidí ver el número del taxi y el sitio, al llegar al Coubertin, una escuela privada sobre la carretera de Atzompa, la chica le dice que la baje ahí, entonces, cuando va a mover la palanca para bajar la velocidad, él mete su mano entre mi falda y agarra mi pierna, en ese momento reaccionó, le empujó la mano y grito para que me escucharan y vieran lo que estaba pasando; me bajó del taxi, la chica que venía a lado mío  me ayuda, me jala para salirme del taxi rápidamente , ella le bota el dinero y lo empieza agredir con palabras al igual que yo, él y los dos pasajeros de atrás se burlan y se arranca lo más rápido que puede, para esto la chava me pregunta que si estaba bien que para dónde iba, le digo que hacia la escuela, ella espera a que me suba a un mototaxi para que me lleve segura, me subo y trato de tranquilizarme, llego a la escuela y al ver a la primera secretaria de ahí corro y la abrazo y le cuento todo lo que pasó; ella me ayuda, me escucha, me lleva con un policía, le décimos, esperamos a que llegue el director para proceder, le marco a mi mamá, le comento lo que pasó y le pido que vaya por mí, pues sí me sentía sucia, sentía una impotencia de no haber podido hacer nada más que empujarlo y bajarme.

Pero, me pregunto, si esa chica no hubiese estado ahí y me hubieran llevado a otro lado, o quizá me hubiera agredido dentro del taxi sexualmente, que estuvieran pasando en estos momentos.

Gracias a Dios supe qué hacer en ese momento: pedir ayuda.

No se imaginan lo feo que se siente estar en ese lugar en el cual sabes que a veces no sólo te tocan si no llegan a más cosas.

Chicas cuídense, no dejen que las toquen, basta de lastimarnos de tocarnos cuando no queremos, esto me pasó hoy a mí, pero quizá le pase a otra estudiante.

Los datos del taxista son: número 16 de taxi, de la ruta San José Atzompa, el hombre es gordo moreno y de complexión robusta.

Yo no entiendo por qué la gente es así.

Sí, así es, fui a poner mi declaración, porque el simple hecho de que te toquen sin que tú no quieras ya es un delito muy grave.

Pero sí, como siempre, la justicia jamás está.

Así que chicas, de verdad amigas, desconocidas, compañeras, maestras, hermanas, mamás, abuelas, tías, primas, cuídense, no estamos solas, entre nosotras podemos seguir ayudándonos.

Basta de lastimar a la mujer”.

#NiUnaMas

#NoEsNo

#SinNosotrasNoSonNada

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